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Marina Meseguer en La Vanguardia

CiU continúa afirmandose como la formación ganadora de las próximas elecciones del 28-N, y se queda a dos escaños de conseguir la mayoría absoluta, así lo reflejan los datos del Racómetre de RAC1 del mes de octubre después de realizar una encuesta telefónica a 1.000 personas de toda Cataluña. Según el Racómetre, se llevaría entre 65 y 66 diputados, lo que supone que cerca del 42% del electorado votaría a la formación nacionalista, una cifra superior a la del último sondeo, en que se preveía que obtendría entre 63 y 65 escaños.

Los miembros del tripartito acentúan la suya caída. El PSC podría perder hasta diez escaños con respecto a las autonómicas del 2006 y obtendría entre 27 y 28 diputados, una cifra que baja en relación a la encuesta del mes de septiembre, cuando los resultados lanzaron la cifra de entre 30 y 31.

ERC modera la suya caída, aunque pierde a la mitad de sus diputados y pasa de 21 a entre 11 y 12, uno más que en el anterior Racómetre. ICV sería el miembro del tripartito que menos notaría el desgaste y podría perder entre uno y tres diputados con respecto a los 12 que ahora se sientan en el Parlamento.

Con estos resultados, el PP, aunque perdería un escaño con respecto a 2006 y se quedaría con 13 diputados, se convertiría en la tercera fuerza política de Cataluña. Ciutadans consolida su propuesta y podría conseguir un nuevo escaño, de manera que ya tendría cuatro. Finalmente, la nueva formación que entraría a formar parte de la Cámara serían los independentistas de Solidaridad Catalana, capitaneados por Laporta, que podrían llegar a obtener hasta 4 escaños.

La voluntad de cambio es mayoritaria según el sondeo. Cerca del 80% de los catalanes, un 77,9%, considera positivo o muy positivo un cambio en el Gobierno de la Generalitat. La encuesta realizada por la emisora revela que existe un gran consenso al respecto: el cambio se impone en todas las franjas de edad.

El Racómetre también revela la buena consideración de la cual disfruta el líder de CiU, Artur Mas, que es el líder mejor valorado del panorama político catalán y lo único que aprueba, aunque no pase del suficiente (uno ajustado 5,39). El resto, incluidos todos los líderes de los grupos que componen el Gobierno tripartito, obtienen un suspenso. El segundo político mejor valorado, aunque suspendido con uno 4,58, es el presidente de la Generalitat, José Montilla (PSC), al cual sigue Joan Herrera (ICV), con uno 4,40, y Joan Puigcercós (ERC), con uno 4,30. Por debajo del cuatro destacan la popular Alicia Sánchez Camacho, que es la tercera política peor valorada con uno 3,30 y el expresidente del FC Barcelona y líder de Solidaridad Catalana, Joan Laporta, que obtiene la peor calificación, uno 3,07, por debajo de incluso del líder de Plataforma por Cataluña, Josep Anglada.

Entre los dos políticos mejor valorados según el sondeo, más de la mitad de los catalanes, un 50,5%, prefieren que gobierne Artur Mas con respecto a José Montilla, que es el preferido por el 23,1% del electorado. Aunque también hay que precisar que un 20,7% no prefieren ni el uno ni el otro.

La opinión pública catalana se muestra más fracturada según el sondeo de RAC1 en caso de que el futuro gobierno necesite pactar, aunque son los más los que prefieren un gobierno con mayoría suficiente de CiU (un 23,2%). En segundo lugar, el Racómetre revela que los catalanes preferirían un gobierno formado por CiU junto con ERC (12,7%), por delante de una coalición entre PSC y CiU (un 10,1%).

Finalmente, el desencanto con la política crece y el 28-N la abstención será mayor que en el 2006, en estos comicios sólo un 54,04% de los catalanes acudirán a votar, un 2% menos que hace cuatro años. La baja participación afectaría especialmente a los electores próximos a PSC y ERC.

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